“En caso de que la quimioterapia redujera su fertilidad preservé una muestra de mi esperma, pero María Trinidad (2) fue concebida sin ayuda médica. En el momento de mi diagnóstico no pensé en ello, pero mi médico sugirió hacerlo. Hoy, este tema toma mayor importancia, cuando miro a los ojos de Trini cada día. Es su mirada lo que me hace feliz, y lo que espero cada día cuando vuelvo a casa.” Silvio (29) tiene Linfoma No-Hodgkin en remisión desde 1996. Foto: Eduardo Torres